09 julio 2009

Me compro el abrigo donde me sale de los huevos!



Recuerdas aquel viejo chiste del tío que va en un autobús y, a cada cosa que hace, el conductor le remite a un cartelito con alguna regla en plan "no hable con el conductor", "no ponga los pies encima del asiento", etc., y al bajarse el tío indignado le dice al conductor que se va a comprar el abrigo donde le salga de los huevos aunque haya otro cartelito en el bus que dice "cómprese el abrigo en El Corte Inglés"? No lo conoces? No? Qué infancia más triste, macho.

Da igual. El caso es que desde hace un tiempo hay varias campañas publicitarias diciéndonos que deberíamos comprar productos de marca y no de marcas blancas. Algunos te lo razonan y todo, viniendo a decir casi que si te compras un yogur marca Eroski vas a ser el culpable de la llegada del Apocalipsis y que si lo compras Danone salvarás al mundo de la crisis financiera, de la gripe A de los cojones y del VIH. Y por otro lado, muchos anuncios de productos de marca acaban con la coletilla "no fabricamos para otras marcas", cada vez más.

Pues una cosa les voy a decir, señores de las marcas: hagan ustedes una fila delante mío y empiecen a meterse cada uno de ustedes sus productos de marca por el mísmisimo culo en orden alfabético, empezando por los acondicionadores de pelo y acabando por el zumo de uva, y una vez tengan dentro todo su stock de productos de marca se me van todos sonrientes a la mierda.

Yo me compro el abrigo donde me sale de los huevos, eso lo primero, y no necesito que ningún ricachón de mierda propietario de una multinacional de la alimentación al que he dado de comer durante años me haga sentir culpable ahora por comerme unos cereales de marca blanca. Vamos, hombre, hasta ahí podíamos llegar. Yo me compro lo que veo con una mejor relación calidad/precio, así de claro, y me importa tres cojones si el apellido del jamón dulce es Campofrío o Aliada... sobretodo si me encuentro con marcas blancas como Hacendado (la de Mercadona) que, qué cojones, son baratas y co-jo-nu-das, aún no he encontrado un producto Hacendado que no esté a la altura de sus competidores de primeras marcas, muchas veces es incluso sorprendentemente superior. Y si está igual o mejor y es más barato... por qué cojones tengo que sentir algún tipo de fidelidad hacia las marcas? A ver, me lo expliquen, señores, qué favores me han hecho ustedes a mí hasta ahora? Me han donado un riñón? Me han pagado media hipoteca? Me han guardado una plaza de aparcamiento? No. Si acaso les he hecho yo a ustedes el favor de comprar sus productos... como mucho, acepto una relación de iguales en la que hemos intercambiado dinero por productos. Pero ustedes a mí no me han regalado nada, no les debo absolutamente nada, señores.

Es muy significativo el hecho de que muchos de estos anuncios de "consume productos de marca, cabrón" nos vienen como recomendados por la cadena televisiva de turno. Claro, las marcas blancas se anuncian más bien poco en televisión, no? A las televisiones les caen mejor los productos de marca, que se dejan sus dineros anunciándose en las pausas publicitarias. Total, que unos señores con mucho dinero echan una mano a otros señores con mucho dinero para que yo, que no tengo un duro, me sienta culpable y decida darles más dinero a esos señores que ya tienen mucho, incluso en esta época de crisis en la que a mí me cuesta más esfuerzo rascarme el bolsillo. Precioso me parece, olé.

Y lo de "no fabricamos para otras marcas" ya me parece el recochineo final. Señores, creo que deberían ser más fieles a la verdad y decir "no fabricamos para otras marcas AHORA", porque la mayoría de primeras marcas han estado nutriendo a las marcas blancas durante años. Circulan desde hace tiempo listas bastante fiables en las que se muestra qué compañías fabrican (o fabricaban) cada producto de las marcas blancas, no hay que más que buscarlas en dos minutos. Entonces, quizá es que mientras se sacaban ustedes un dinerillo sin ver peligrar su negocio porque las marcas blancas no eran una competencia seria ya les parecía bien, no? Ah, amigos, es que no se puede tener todo.

La mayoría de la gente es gilipollas, eso es un hecho que me encanta poner de manifiesto en este blog a la mínima que puedo, pero resulta que la gente, a la hora de gastarse su dinerillo, no es tan gilipollas como ustedes se creen, señores. Así que me temo que vamos a seguir todos comprándonos el abrigo donde nos salga de los huevos.

Jódanse.

P.D.: Estoy pensado ahora en otro tipo de anuncios que me tocan los huevos, los que me dicen que no gaste agua o que no me pase con la temperatura del aire acondicionado o que no me deje luces encendidas innecesariamente. Mientras pague yo la factura a final de mes, gasto la energía que me dé la real gana, estamos? Primero, me la traen flojísima todos los jipis ecologistas del cosmos; segundo, lo que tienen que hacer es controlar a las grandes empresas, que son las que contaminan a gran escala y dejar de darme por saco a mí, que no voy a pasar calor teniendo un aire acondicionado en casa, me da igual si se mueren tres koalas por ello!